Sentada entre montañas de metal
Quemadas y herrumbrosas por un sol ácido
Mira un cielo sin nubes.
Inventa formas en los filos rocosos de la nada.
Imagina viento, incluso lluvia,
Historia antigua.
Fachadas desconchadas a su espalda,
Matojos rodantes, aceras vacías,
Suelos negros y pegajosos.
La niña no llora, no recuerda.
No hay herencia ni pasado
Sepultado bajo cúpulas hundidas.
Vallas caídas y dobladas,
Tristes
Sin nada que proteger.
Futuro rojizo y espeso,
Lento y fatigado
Marcado por arrugas profundas
No hay comentarios:
Publicar un comentario